Caballos en las nubes
Casi una semana en Hong Kong. Un impas de espera; de que terminara el fin de semana, de que saliera la visa de China y luego la visa de Taiwan.
Sin libertad de salir lejos porque había que recogerla o dejarla.
Tampoco había muy lejos, hablamos de islas pequeñas pero pude conocer un par de buenos lugares.
Kowloon, Happy Valley, Stanley, The Peak y Dim Sum
La salida de Japón me dejó sin palabras. Literalmente.
Escribir me esta costando mucho más en tierras menos inspiradoras.
La visita a Hong Kong es lenta y calurosa. Un grupo de islas que históricamente estuvieron separadas de la gran China están poco a poco siendo finalmente absorbidas, cuando menos comercialmente
Me remití entonces a cubrir la zona con las recomendaciones de las guías y con bloqueo de intento de escritor, las utilizo para armar este post.
Absolutamente hay que subirse al tranvía, pasear por la Isla de Hong Kong en estos armatostes ingleses que son especialmente baratos comparados con el metro aunque toca aguantarse un poco de smog y la falta de aire acondicionado. 34 grados ouch!.
Imprescindible! Comer Dim Sum. Pequeños dumplings (mini bolsitas) de masa que llevan alguna cosa rica adentro cocidas en vapor dentro de una canasta de palma. Me fui a buscar un lugar donde los vendieran pero que el menu estuviera en inglés para no comerme un molusco y perder más días en ese lugar metido en un baño. Bien, correcto.
Un «must» cruzar de Kowloon a Hong Kong en el tradicional Star Ferry que lleva décadas cruzando gente por un pago ridículo y lo deja a uno en la estacion / muelle Central.
Es lindo, realmente muy barato y la vista de la ciudad es aún mejor.
Subir a la punta «The Peak», en la montaña posterior a todas las fotos de Hong Kong. Ahí, como en todas las grandes ciudades, se fueron a vivir los ricos y se mandaron a hacer un funicular muy lindo que lo lleva a uno a una estación, centro comercial y cobran todo lo que uno se ahorro en el ferry.
Para ver toda la ciudad desde arriba hay que tener creatividad e imaginársela entre todas las nubes que pasan por ahí. Yo no lo logré.
Lo mejor del paseo fue que a unas chinitas les parecí muy exótico y se querían sacar fotos conmigo y estuve hablando con ellas. Creo que pensaban que era una estrella de Bollywood. Ja!
Finalmente, siempre en las guías viene la opción de asistir a las carreras de caballos y visitar las playas del otro lado de la isla.
Para eso tuve suerte y me encontré de nuevo con una pareja de amigos Colombianos; Juliana y Carlos, que viven cerca en China continental y que me hicieron el día llevandome de paseo. Primero en un bus a Stanley, que es una bahía muy linda en donde hay zonas más residenciales y un ambiente bastante más ligero que en la gran ciudad. Después en la noche pudimos ir al Hipódromo Happy Valley en donde por nuestro status de turistas pudimos acceder a la zona de socios y vimos algunas carreras de caballos.
Creo que más interesante que las carreras fue observar a los apostadores profesionales y sus hábitos y vicios.
Me niego a seguir escribiendo de Hong Kong y de sus edificios feos.
Ya pasé después de eso 3 días muy lindos en Taiwan y quiero pasar al siguiente tema.
Pero ese ya vendrá mañana.
Ya me extrañaba que no escribieras!!!
Me parece que tu viaje es un reflejo de la vida, hay épocas en que nos sentimos inspirados, felices y realizados, y otras que por más que lo intentamos no le vemos sentido a todo esto. Lo importante es aprender de todas las experiencias, malas y buenas, así como de toda la gente que se nos cruza en el camino, de las que apreciamos e incluso de las que no apreciamos… no creo en las casualidades.
En medio de este esos edificios feos, supongo que la vida te quiere decir algo.
Maravillosas las chinitas!!! les hiciste el día,
Un beso!!
Corto comentario sobre esta nueva jornada mi estimado amigo para desearte mucho ánimo para que nos sigas contando esta buena historia.
Un abrazo,
John